Madre de Marta María Forestello, quien fuera estudiante de la UNR y fue secuestrada por la dictadura en agosto del ’77 junto con su hija Victoria de apenas un año.
Quince días después del secuestro Lila se presentó en el Juzgado de Menores y finalmente pudo recuperar a su pequeña nieta con signos de maltrato y abandono.
Luego de la dictadura Lila fue querellante y brindó importantes testimonios en varias de las causas que lograron condenas a varios genocidas.
Abrazamos a lxs familiares y compañerxs de Lila en este momento tan duro.