Esto es claramente una decisión política del gobierno de la provincia de Santa Fe de ajustar en la salud de lxs compañerxs, que fue profundizada con la tablita de Balagué. Con la excusa de controlar el ausentismo están avanzando sobre los derechos de salud laboral, sin importarles la salud de lxs compañerxs docentes.
Repudiamos las auditorias porque tienen un claro plan recaudatorio.
Algunos casos puntuales:
“Cuidaba de mis padres, cuando en un momento tengo que salir a comprar pañales para mi mamá, ausentándose por media hora, viene la auditora. Llame al 0800 y no podían hacer nada. Vine al ministerio y no me solucionaron nada. Las consecuencias de no estar en la habitación cuando llegó la auditora se traducen en un descuento de una semana de trabajo. No sé cómo voy a pagar mis impuestos, además pago un alquiler y si me descuentan eso se me hace muy difícil”.
“Tengo una enfermedad que padezco hace 1 año y medio (esclerosis múltiple), de lo cual, sólo pedí licencia en los momentos en que me interné. Trabajo doble turno porque el sueldo no me alcanza para sobrevivir con un sólo salario. Tengo dos hijas, hace unos meses pedí licencia para cuidar a una de ellas, como vivo en un edificio en el que el portero no funciona aclaré que me llamen por teléfono. El médico fue, no me llamó y me descontaron en los dos cargos; más allá que estaba aclarado. Además, IAPOS no me quiere reconocer la medicación que tengo que tomar. A dos días de quedarme sin medicación me piden un montón de estudios, y en algunos casos, repetir los que ya presenté”.
“Al segundo día salgo un ratito a caminar, por recomendación médica, y justo vino el médico auditor. Como no estaba me dejo una notificación que me tenía que presentar a trabajar al día siguiente. Al otro día reclamé en el Ministerio de Educación y luego de dos meses me encuentro que me descontaron los días, y no figura en el recibo de sueldo. Me descontaron 10 mil pesos por doce días laborables”.