Este protocolo que desde el año 2012 fuimos construyendo y logrando su implementación en el departamento Rosario, más específicamente en la regional sexta, era de necesaria instalación, en toda la provincia.

El asesinato de la compañera Vanesa Castillo fue un punto de inflexión

Las compañeras de la escuela de Alto Verde tomaron como propio este reclamo y lo llevaron a cada uno de los ámbitos de discusión.

Saludamos como un logro la implementación del protocolo que nos va a permitir a lxs docentes intervenir cuando detectamos situaciones donde se vean vulnerados los derechos de nuestrxs niñxs y adolescentes, sin duda el eslabón más débil de nuestra sociedad, sin que ello signifique  poner en peligro nuestra integridad.

Entendemos que no es por sí sólo el protocolo,  la herramienta que va a solucionar todos los problemas de vulnerabilidad ni de protección absoluta de todxs,  lxs docentes, pero sí es, un paso muy importante, un avance en  el grado de responsabilidad, que hoy estará a cargo del Estado y no de lxs docentes.  

Una vez más esto es fruto de la lucha constante y de la persistencia de quienes vimos la necesidad de protección del conjunto de los compañerxs.

Saludamos también que al fin se haya podido incluir en la discusión paritaria, porque sólo así será garantía para toda la docencia santafesina.

Seguiremos reclamando por mayor inversión en recursos materiales y humanos para atender las infancias y las escuelas.

Licencia extraordinaria, y no por enfermedad para los docentxs que deban correrse de sus lugares de trabajo, y en caso de ser necesario traslado extraordinario.

Así como un protocolo que encuadre el accionar de los medios de comunicación que muchas veces ante estos hechos exponen y  devastan comunidades educativas enteras.