En el ataque golpearon a tres compañeros que se encontraban de guardia –entre ellos, un discapacitado- y durante más de dos horas cortaron cables, destrozaron servidores y revolvieron papeles.

Consideramos que este tipo de hechos no sólo es un duro golpe a todos los trabajadores que quieren desarrollar su tarea libremente, sino que representa una embestida contra la libertad de expresión.

Por otra parte, cuestionamos el accionar de la Policía que se encargó de custodiar y proteger a los agresores, con el único fin de que puedan llevar adelante los destrozos sin que haya algún detenido. Esto sucedía mientras los compañeros de Tiempo Argentino permanecían fuera del edificio, a pesar de la intensa lluvia.

Los delegados de Tiempo Argentino denuncian que el objetivo Martínez Rojas y sus matones es impedir que el diario, que desde fines de marzo se publica a través de una cooperativa de trabajo, siga saliendo. La patronal del empresario K Sergio Spolzki desertó en 2015, adeudando sueldos y aguinaldos. Tras varios meses de ocupación de la redacción, se dio a conocer que la empresa fue vendida a Martínez Rojas, quien no puso un peso y busca completar el vaciamiento iniciado por Spolzki.

Desde Amsafe Rosario, nos solidarizamos con los trabajadores de Prensa  de Tiempo Argentino y el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBa) que en el día de hoy ya convocó a una asamblea en la puerta de T.A.