En las últimas reuniones zonales de delegados se planteó la necesidad de generar espacios de discusión en cada una de las escuelas sobre las principales problemáticas que nos atraviesan: condiciones de trabajo, situación de deterioro de los edificios escolares, faltante de cargos, necesidad de salas de cuatro, problemas de violencia, sobrecarga laboral, discriminación a los compañeros jubilados, etc.

También es importante que todos podamos informarnos debidamente sobre las elecciones que se realizarán en nuestro gremio el 15 de junio, a fin de que todo el proceso electoral se desarrolle con total transparencia.

Proponemos que todas las escuelas se organicen de manera tal de que puedan contar con una hora para desarrollar el debate sin la presencia de alumnos.

Lo que sigue es el material que debe imprimirse para facilitar el desarrollo del debate. 

 

Jornadas gremiales en las escuelas – Mayo 2016

Los días 27 y 28 de abril realizamos reuniones zonales de delegados en donde más de 220 representantes de escuelas debatimos sobre los principales problemas que nos atraviesan como docentes.

Allí se acordó en la necesidad de generar ámbitos de discusión gremial en las escuelas; un tiempo y un espacio en donde podamos detenernos para debatir y en el que cada compañero pueda transmitir su mirada, sus preocupaciones, sus ideas.

Amparados en la Ley de Contrato de Trabajo Nº 23551, que en su artículo 4º inciso C autoriza a los trabajadores a realizar reuniones en sus lugares de trabajo, proponemos que cada escuela se organice y defina un tiempo aproximado de una hora por turno sin alumnos para llevar adelante este debate.

A continuación planteamos algunos de los ejes del debate:

Salarios, inflación, paritarias, discriminación a los jubilados, luchas docentes:

Resulta bastante evidente que los trabajadores, una vez más, estamos pagando los costos de la crisis. Sigue el aumento constante de los precios de los productos de primera necesidad y los tarifazos parecen no tener fin. Los despidos se extiende a diversos sectores de trabajadores públicos y privados, y en nuestro sector se expresan con los cierres de los programas nacionales: coros, orquestas, CAI, CAJ, tutorías académicas, etc.

El acuerdo firmado en la paritaria y defendido por la conducción de Sonia Alesso significa un nuevo retroceso. En resumen de cuentas: aumento en cuotas, por debajo de la inflación y con un gran crecimiento de las cifras “en negro”. Esto último significa achatamiento de todas las escalas (las de antigüedad y jerarquía), menores aportes a la obra social y a la caja de jubilaciones y una nueva discriminación a los compañeros jubilados que recibieron un aumento mucho menor al que recibimos los activos.

A pesar de la “borrada” de la conducción de la Ctera que una vez más privilegió acordar con el gobierno nacional, fueron muchas las provincias que iniciaron las clases con paro y hoy son tres las que sostienen la lucha a pesar del aislamiento, las “apretadas” y la represión: Santiago del Estero, Tierra del Fuego y Santa Cruz.

Con este panorama creemos que se impone la necesidad de la convocatoria a una nuevo Asamblea Provincial y a un Congreso de la Ctera a fin de resolver colectivamente qué iniciativas tomar para enfrentar este ajuste que estamos soportando.

Condiciones de trabajo:

El tema es complejo y tiene una serie de aristas diferentes. La sobrecarga laboral y el empeoramiento de las condiciones de enseñanza-aprendizaje son las dos caras de una moneda que padecemos en forma creciente. Los compañeros reemplazantes ven limitado su acceso a la obra social y a las licencias por enfermedad y en muchos casos, tienen que esperar hasta cuatro meses para cobrar.

Más allá de los anuncios mediáticos, más allá de las mentiras que difunde la Ministra Balagué, una gran cantidad de edificios escolares padece un profundo deterioro. Aulas que se inundan, paredes electrificadas, falta de agua y de gas, pozos que se hunden, aberturas en malas condiciones, baños en estado deplorable y un largo etc. expresan la realidad de muchas de nuestras escuelas. En varias escuelas faltan aulas y en algunas han tenido la gran idea de resolver el tema con “aulas-conteiner” que encima dejan a los chicos sin patios.

La inversión de $53 millones que plantea el Gobierno Provincial para ser aplicada en el 2016 aparenta ser un monto significativo pero resulta absolutamente insuficiente ante el alto grado de deterioro en el que se encuentran los edificios escolares y servirá para dar respuesta a solo un grupo de escuelas de la provincia y a seguir colocando “parches”.

Desde hace años, desde Amsafe Rosario venimos denunciando esta situación con la intervención directa  y permanente y el compromiso de los docentes y de los  Delegados en Prevención con su formación, capacitación y acción directa.

Existen escuelas que se encuentran en obras desde hace años, lo cual  hace que se genere una dilación  y una situación de riesgo  permanente. Otras tienen obras compartidas entre Provincia y Nación que siempre se complican y nunca se terminan.

La disparada de precios general hace que los presupuestos presentados sean insuficientes a la hora de concretarse el trabajo en las escuelas, lo cual retrasa nuevamente todo, ya que los directivos se ven obligados a pedir nuevos presupuestos.

Denunciamos también que en las obras en plena ejecución no se cumplen la condiciones que establece el protocolo de Escuelas en Obras, acordado ente Gremio y Ministerio (ver el material que hemos enviado a las escuelas).

Desde el equipo de delegados en Prevención de Amsafe Rosario, que hace años viene trabajando sobre las condiciones de trabajo de los compañeros docentes y las diferentes problemáticas que éstos viven dentro de las escuelas, es necesario aclarar que no es en el contexto específico de una campaña electoral que se realizan los reclamos, sino que se han dado muestras permanentes y se siguen dando.

Miente la Ministra cuando vincula nuestras denuncias con la campaña electoral. Se han realizado capacitaciones, salidas a terreno, Mapas de Riesgo, reuniones semanales permanentes y presentaciones al Ministerio que ponen en evidencia la tarea de cada Delegado de Prevención. Impulsamos una política participativa donde  se  intenta sumar, colectivizar, siendo el eje del trabajo la Investigación Participativa, entendiendo que nadie conoce más de su trabajo que el propio trabajador. Estamos convencidos de que la participación de cada uno de los compañeros, apropiándose de esta compleja tarea, ayuda a desnaturalizar y hacer visible lo invisible, todo aquello que el Estado trata de evadir, sin tener en cuenta las condiciones en que los docentes y alumnos  llevan a cabo su encuentro cotidiano.

Es necesario un plan de reparaciones y construcciones mucho más ambicioso y que el Ministerio genere mecanismos para que no sean los directivos los que tengan que asumir tareas que no tienen que ver con su formación y función.

Invitamos a los compañeros a que, luego de las jornadas gremiales, acerquen al Cuerpo de Delegados las conclusiones a las que arribaron sobre el debate generado en cada institución.

4 de mayo de 2016