La comunidad educativa manifestó con este acto simbólico la preocupación por el inicio del ciclo con exámenes que no pudieron ser tomados y el estado del resto del edificio exigiendo la reparación y el refuncionamiento del establecimiento.
Esta situación que pudo ser una tragedia no es consecuencia de una fuerte lluvia sino de la desidia y la falta de inversión. Hay una larga lista de escuelas con problemas estructurales y grandes deterioros sobre la cual no hay respuestas.
Desde nuestro gremio acompañamos este abrazo simbólico y seguimos reclamando por un urgente plan de reparaciones de edificios escolares, más inversión, la defensa de nuestras condiciones de trabajo junto al salario.
Invitamos a leer en archivo adjunto una nota de Muni Finkelstein, ex docente del Nacional 2.