En los meses de noviembre- diciembre, los empresarios, tomando como excusa la devaluación anunciada por el gobierno de Macri y como es costumbre, produjeron una escalada fenomenal en los precios de alimentos, medicamentos y otros insumos. Esto implicó una transferencia de riquezas al sector empresario, sin ninguna medida que compense la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores, jubilados y sectores más vulnerables. A esto hay que agregar la eliminación del cepo cambiario y la baja de las retenciones al agro, medidas todas que siguen beneficiando a los sectores más concentrados de la riqueza.
Nuestro sector, al igual que muchos trabajadores vienen sufriendo un deterioro salarial que no logra recomponerse. En los últimos 12 años sufrimos una devaluación sistemática debido a la inflación, el IVA y el coercitivo impuesto a las ganancias en una lucha permanente contra los topes salariales impuestos desde las esferas nacionales y provinciales con total acuerdo de la dirigencia de CTERA.
El propio gobernador Lifschitz admitió que las medidas tomadas por el flamante gobierno nacional tendrían un impacto que repercutirá en el bolsillo de los trabajadores, sin embargo expresó que su política en relación a las paritarias será encuadrarse en la misma línea del gobierno nacional.
Desde Amsafe Rosario sostenemos la defensa del salario equivalente a la canasta familiar, paritarias libres, la resolución de los problemas de infraestructura, el pago a término de los jubilados, y la creación de todas las horas y cargos necesarios.
Para ello exigimos a la Comisión Directiva Provincial la urgente convocatoria a una Asamblea Provincial, que dé posibilidad al conjunto de la docencia santafesina de debatir con los tiempos necesarios para fijar el salario a reclamar en paritaria.
La defensa de nuestro salario pasa por exigir la canasta familiar para todos.